En 1993, la Armada colombiana halló por primera vez, un semisumegible de siete metros de largo, realizado con fibra de vidrio y con una capacidad para transportar una tonelada de cocaína. Podía sumergirse a tres metros de profundidad, dejando fuera un radar y la escotilla.
Casi 18 años después del hallazgo del primer semisumergible usado por el narcotráfico para sacar drogas, la Armada colombiana incautó, un sumergible que podía navegar a diez metros de profundidad, dejando fuera sólo 50 centímetros de un periscopio con dos cámaras con visores diurnos. Estaba listo para sacar cinco toneladas de cocaína hacia las costas de México. Esta embarcación, hallada el 15 de febrero del año pasado, es la más moderna hallada en este país, en una combinación de ingeniería naval con el ingenio artesanal, con el que desde hace años los narcos colombianos intentan burlar el control de las autoridades para sacar droga hacia el exterior.
Durante la década de los 80, las lanchas rápidas, eran las embarcaciones preferidas de los narcotraficantes, debido a su alta velocidad de crucero tanto de día como de noche; pero al mejorar la cobertura de radar por parte de México, y especialmente de los EE.UU., los narcotraficantes colombianos se han adaptado a los nuevos métodos y tecnologías para evadir la detección en alta mar, diseñando y construyendo los apodados narco-submarinos.
Un narco submarino de 20 metros puede transportar unas 10 toneladas de cocaína a una velocidad de 23 km/h. En 2006, las autoridades estadounidenses declararon que habían detectado tres narco-submarinos, mientras que en 2008 reportaron la detección de diez por mes. La costa occidental de Colombia tiene muchos ríos que cruzan la selva y desembocan al Océano Pacífico, facilitando la construcción clandestina, difícil de descubrir, pero con un fácil acceso al mar. A veces, los narco-submarinos son fabricados en una bodega, transportados por partes y ensamblados en las costas del Océano Pacífico o del Océano Atlántico. Se calcula que el tipo de narco-submarinos que se han confiscado hasta la fecha, implica un costo de construcción de 1 millón de dólares cada uno, así como un tiempo de construcción aproximado de un año.
Debido a que los narco-submarinos son de fibra de vidrio y que se desplazan prácticamente por debajo de la superficie del mar, es muy difícil detectarlos por medio visual, radar o por sonar. Algunos cuentan con una delgada capa de plomo en la cubierta, para evitar detección por medio de luz infrarroja. En la mayoría de los casos, la mejor oportunidad de detección es de día y por medio visual desde una aeronave. Se han interceptado narco submarinos en el océano Pacífico, océano Atlántico y en el mar Caribe. Los guardacostas de los Estados Unidos declararon que los narco submarinos cuentan con navegación por GPS y un sistema de apoyo logístico completo, por buques de pesca que los reabastecen de combustible, agua, comida e información de barcos y aeronaves en la proximidad.
A continuación, os dejo un vídeo en el que autoridades de la armada colombiana muestran como son los narco-submarinos exterior e interiormente y amplian un poco más la información que he recopilado.
No hay comentarios:
Publicar un comentario